La serie de Apple TV repasa el que fue uno de los mejores años de la historia de la música, pero también uno de los más convulsos.
Apple TV estrenó a mediados de este año una serie que analiza todo lo acontecido musicalmente en 1971. La serie hace un paralelismo entre los acontecimientos históricos ocurridos en Estados Unidos y la influencia que la música tuvo en ellos. Se puede decir que este año supuso el fin del sueño hippie. La violencia inundaba las calles, con la guerra de Vietnam muy presente y los todavía recientes crímenes de la familia Manson.
En el plano musical, quizás sea uno de los años en que mejores discos se publicaron. Es el año en el que apareció el último disco de The Doors, L.A. Woman, del que ahora se ha publicado una edición especial por su 50 aniversario. Desgraciadamente, Jim Morrison no vería el disco publicado pues fallecería en París, ciudad a la que se había retirado huyendo de sus problemas con la justicia.
La serie esta dividida en ocho capítulos que abordan diversos aspectos que de alguna forma también conectan con el presente. El movimiento Black Lives Matter se puede vislumbrar perfectamente en el capítulo titulado Respect. También se aprecia en muchos de los capítulos como las drogas jugaron un papel demasiado prominente, empañando muchos de los ideales que se pretendían defender.
En la serie también se puede apreciar como artistas consagrados van dejando paso a otros que en ese momento estaban iniciando su carrera artística. Tal es el caso de David Bowie, quien no tardaría en despegar con su encarnación de Ziggy Stardust, pero en 1971 todavía era un cantante post-hippie, cuya actuación en el festival de Glastonbury no fue todo lo legendaria que algunos han querido ver posteriormente.
Otros como The Rolling Stones, aprovecharon el vacío dejado por The Beatles para encumbrarse como la mayor banda de rock del mundo. Exiliados en el sur de Francia para huir de las altas cargas fiscales del Reino Unido, grabaron uno de sus mejores discos, el doble Exile on Main Street. Ese mismo año ya habían publicado otra obra maestra, Sticky Fingers. Sin duda fue su década gloriosa.
El año terminó con la campaña antibelicista a favor de de John y Yoko. El famoso War is Over se pudo ver en las marquesinas de Nueva York, ciudad en la que el ex-beatle estableció su nueva residencia y en la que acabaría tristemente encontrando la muerte al final de la década.
El final de la serie también se centra en la aparición de la música electrónica, la creación de los sintetizadores, usados por grupos como The Who y el fenómeno de esta corriente tecnológica en Berlín, con Kraftwerk y su transición de la batería acústica a los sonidos de percusión electrónicos a través de las cajas de ritmo.
