El último disco editado en vida se alzó con el premio al Best Recording Package en la 59ª edición de los premios Grammy.
La dirección de arte de este ya histórico álbum fue realizada por el director de arte británico Jonathan Barnbrook, quien llevaba colaborando con Bowie desde Heathen, y ya se había quedado a las puertas de conseguir el premio con el anterior álbum del Duque Blanco, The Next Day. Otro trabajo arriesgado en el que se intervenía sobre al mítica portada de Heroes.
El diseño de Barnbrook cuenta con una estrella negra recortada sobre un fondo negro y la tinta UVI como elemento de post-impresión para resaltar las letras.
Contó Barnbrook al recibir su premio que Bowie tenía la rara habilidad de conseguir que la gente produjera su mejor trabajo y al mismo tiempo que resultará divertido.
Dicen que cuando ves una estrella negra en el firmamento sabes que ha llegado tú hora, probablemente Bowie la vio y por eso el disco esta en vuelta en ese aire de misterio que también refleja su diseño.
Este es el primer premio en esta categoría para David Bowie quién siempre se ha preocupado por la imagen y quién cuenta en su carrera con portadas irónicas como la de Aladdin Sane.
