Ahora que termina un año que en muchos aspectos ha sido para olvidar, comienzan las listas de cuál ha sido la mejor canción, el mejor disco, etc. Nosotros no íbamos a ser menos y hemos elaborado nuestro propio ranking con las mejores portadas. Puede que para algunos el diseño de un disco en un mundo en el que casi todo se consume en digital, ya no tenga razón de ser. Pero para nosotros sigue siendo un valor añadido a la calidad del producto final.
La lista ha sido elaborada teniendo en cuenta el diseño de la portada y no tanto el packaging. También hemos intentado evitar apropiaciones ajenas, nos gustan muchos las portadas de los últimos discos de The Strokes o The Killers, pero realmente solamente son buenas elecciones de cuadros de Jean-Michel Basquiat y Thomas Blackshear respectivamente. También hemos dejado fuera de la lista los discos nacionales, que quizás den para otro ranking.
10. Nick Mason’s Saucerful of Secrets – Live at The Roundhouse
El proyecto de Nick Mason, ex-bateria de Pink Floyd, rinde homenaje a la era pre-Dark side, cuando el grupo todavía era considerado una de las mejores bandas de música psicodélica. La portada para este disco en directo grabado en Roundhouse, un antiguo hangar ferroviario en el barrio londinense de Camden, es como no podía ser de otra manera una recreación del estilo psicodélico. Los colores saturados, las formas onduladas, la duplicidad de la imagen y una tipografía de estilo Art Nouveu, una de las grandes influencias del cartel sesentero.
9. Robert Plant – Digging Deep: Subterranea
El último trabajo de Robert Plant es un compendio de lo mejor de su carrera en solitario. La música de Plant funde sus raíces en la música galesa, de dónde parte a explorar nuevos territorios. Todo esto esta muy bien expresado en la colorista portada realizada por el diseñador británico Richard Evans. Su colaboración con Plant se remonta a los años en los que trabajó para Hipgnosis, realizando entre otras las portadas la de unos tal Led Zeppelin.
8. Lady Gaga – Chromatica
Lady Gaga usa el house como modelo para Chromatica, y ella y el coproductor BloodPop canalizan perfectamente la capacidad de la música para inundar una pista de baile con endorfinas y una esperanza vertiginosa y desenfrenada. El diseño del disco podría haberlo realizado el mismísimo H.R. Giger, pues en cualquier momento parece que este apunto de aparecer Alien a comerse a la diva.
7- Neil Young – Homegrown
Neil Young tenía tan preparado para publicar su disco Homegrown en 1975 que incluso tenía encargada ya la portada. Tom Wilkes ya había hecho el diseño de Harvest, el gran éxito de Young, por tanto encargarle otro trabajo parecía lógico. Lástima que el disco quedará archivado en favor de Tonight the night. Por suerte, Neil ha decidido por fin publicarlo como parte de la revisión de su legado que lleva realizando en los últimos años. Y gracias a esto también hemos podido recuperar su preciosista portada.
6- Bob Dylan – Rough and Rowdy Ways
Cuando nadie esperaba ya nada del genio de Minnesota, va y se marca uno de los mejores discos de su carrera, lo cual no es moco de pavo. El bueno de Bob lleva ya unos cuantos discos desapareciendo de sus portadas en favor de excelentes fotografías. En esta ocasión ha seleccionado una de Josh Cheuse, fotógrafo americano que también ha trabajado entre otros para The Clash, Oasis o The Black Crowes. La escena podría ocurrir en cualquier bar de carretera de principios de los sesenta. La jukebox del fondo representa muy acertadamente la increíble capacidad de Dylan para absorber todo tipo de influencias.
5. Taylor Swift – Folklore
Escrito en gran parte en colaboración virtual con Aaron Dessner de The National, Flolklore probablemente sea el mejor disco en la carrera de Taylor Swift. Está lleno de pequeñas joyas y ricas melodías que cuentan una variedad de historias muy bien realizadas. Su fotografía en blanco y negro crea una atmósfera que nos transporta inmediatamente a otro lugar, al que probablemente quiera llevarnos con sus nuevas canciones.
4. Gorillaz – Song Machine Season One
El proyecto multimedia de Damon Albarn tras la disolución de Blur lleva ya siete álbumes de estudio en casi 20 años. El último disco es quizás el más libre de todos. Song Machine Season One recopila pistas creadas para Song Machine, una serie web de videos con letras que presenta una variedad poco probable de estrellas invitadas. Desde Robert Smith a Elton John o Schoolboy Q y St. Vincent. Por supuesto el proyecto no tendría sentido sin la parte gráfica de Jamie Hewlett, responsable de la creación de los personajes, las animaciones, el merchandisign y todo lo que rodea visualmente a Gorillaz.
3. Lilly Hiatt – Walking Proof
La cantante y compositora americana ha mejorado enormemente en este cuarto álbum bien elaborado y expresivo. La hija del gran John Hiatt ha decidido poner la lupa en las historias ajenas. Muchas de ellas observadas y anotadas durante la larga gira que le supuso el toque de atención que supuso en su país su álbum de 2017. Para la portada ha elegido a una artista de su Nashville natal, Kim Radford, conocida por sus murales en las calles de la ciudad.
2. Bad Bunny – YHLQMDLG
Esta portada de Bad Bunny podía estar sacada directamente de un fotograma de una película de Steven Spielberg. Nos dibuja un futuro apocalíptico en el que incluso vemos el coche de ¿Regreso al futuro?. La etiqueta de advertencia no deja lugar a dudas sobre el contenido que podemos encontrar en el interior.
1. Tampe Impala – The Slow Rush
El nuevo disco de Tame Impala es un viaje hermoso, a veces francamente glorioso, con un pop brillante filtrado a través de la curiosidad y creatividad aparentemente ilimitadas de Kevin Parker. Su portada surrealista podría haber sido perfectamente diseñada por Hipgnosis, pero es obra de Neil Krug.
