La tragedia del dirigible LZ 129 Hinderburg en el que fallecieron treinta y seis personas, ilustra la portada del primer disco de Led Zeppelin.
El 6 de mayo de 1937, el dirigible alemán LZ 129 Hinderburg se cubrió de llamas durante una tormenta eléctrica cuando aterrizaba en Nueva Jersey. El accidente en el que murieron 36 personas supuso el fin de este tipo de aviación como medio de transporte. Este hecho fue cubierto ampliamente por la prensa de la época y es la fotografía que aparece en la portada del primer disco de Led Zeppelin.
Según cuenta la leyenda el nombre de la banda fue idea de Keith Moon, batería de The Who, quién en una sesión de grabación junto a Page, Jones y Bonham afirmó que la banda fracasaría y caería como un «Zeppelin de plomo». Nada más lejos de la realidad, pues este primer lanzamiento producido por el propio Page, fue el inicio de una carrera fulgurante. Un disco que por otra parte en ningún momento suena a una banda debutante, sino que más bien parece el sonido de un grupo ya consagrado.
Cuando se publicó el disco, a los descendientes de Zeppelin no les hizo mucha gracia la referencia a un hecho tan desafortunado para su familia. Cuando el grupo tocó en Copenhague, en su primera gira Europea, la baronesa Eva Von Zeppelin, sobrina del inventor del dirigible, se negó a que unos «monos chillones usaran su apellido». Por este motivo, el grupo se presentó por primera y única vez como The Nobs.
» La invitamos al estudio para que nos conociera y viese que éramos buenos chicos. Logramos calmarla, pero al salir del estudio, vio la foto del disco, con el Zeppelin ardiendo y montó en cólera».
Jimmy Page
La contraportada del disco muestra a los cuatro integrantes de la banda fotografiados por Chris Dreja, bajista de los Yardbirds (grupo del que procedía Page).
El diseño completo de la carátula del álbum fue coordinado por George Hardie, miembro de Hypgnosis y con quien la banda continuaría colaborando para futuras carátulas. Inicialmente, Hardie ofreció a la banda un diseño basado en un antiguo letrero de un club en San Francisco: una imagen multisecuencial de un dirigible zepelín en las nubes. Fue Page quien rechazó esta idea y prefirió utilizar la fotografía del Hildenburg que supuestamente le había sugerido John Entwhistle, bajista de The Who. Entonces Hardie reinterpretó la famosa fotografía original en blanco y negro en tinta utilizando un lápiz técnico Rapidograph y una técnica de mezzotinta.
La campaña de promoción del álbum utilizaba el lema «Led Zeppelin: la única forma de volar». Aún a pesar de lo que mostraba su portada, el disco no se hundió en las listas, aunque inicialmente tampoco fue un éxito inmediato.
En 2001, Greg Kot, periodista y criticó de Rolling Stone, escribió que «La portada de Led Zeppelin … muestra la aeronave Hindenburg, en todo su esplendor fálico, hundiéndose en llamas. La imagen encapsula bastante bien la música interior: sexo, catástrofe y cosas que explotan».